Resumen:
Los tics se definen como movimientos (tics motores) o sonidos (tics vocales), breves, rápidos, repetitivos, estereotipados, no rítmicos y carentes de una finalidad, ni que medie la voluntad.
Hasta el 21% de los niños en edad escolar tienen tics, siendo más frecuentes en los varones. Sin embargo, en la mayoría de los casos son transitorios.
En ocasiones, los tics forman parte del llamado Síndrome de Gilles de la Tourette. Este trastorno neurológico se caracteriza por la presencia de tics motores y vocales, asociados a trastornos de conducta.
Desarrollo:
Con frecuencia hay un impulso o señal de aviso, a veces en forma de una sensación sensorial específica (tic sensorial), que precede al tic. Los pacientes dicen que hacen el tic para reducir la urgencia, aunque poco después del tic, la urgencia reaparece.
Dado que los tics alivian el impulso, esto puede considerarse gratificante y la repetición de este comportamiento puede perpetuar el tic como hábito.
El cansancio y el estrés son otros factores causales, pero también lo es el hecho de ser conscientes del tic y la preocupación de que otros lo noten.
El síndrome de Tourette afecta más a los niños que a las niñas y puede estar asociado con el trastorno por déficit de atención con hiperactividad y el trastorno obsesivo compulsivo. los tics pueden ser repentinos, repetitivos e incontrolados y podemos clasificarlos como sigue:
-Tics motores simples: involucran un número limitado de músculos como:
Parpadeo, movimientos oculares rápidos muecas faciales, encogimiento de hombros, tics en la nariz, contracciones del párpado.
-Tics motores complejos: involucran varios grupos musculares como:
Olfatear o tocar objetos golpes en la cabeza, gestos obscenos,
saltar y retorcerse
-Tics vocales simples:
Aclararse la garganta (carraspear o toser), olfatear y emitir gruñidos
-Tics vocales complejos:
Insultar, repetir palabras o frases, maldecir involuntariamente
Aunque el síndrome de Tourette a menudo parece ser autosómico recesivo en la herencia, ha sido difícil encontrar genes anormales.
Hay una pérdida de inhibición en estos pacientes y estudios recientes muestran anormalidades en el sistema GABA.
Ciertamente, también hay una anomalía en la función de la dopamina y los agentes bloqueadores de la dopamina son una terapia eficaz.
El síndrome de Gilles de la Tourette (GTS) es un tic crónico caracterizado por la presencia de múltiples tics motores y vocales que aparecen durante el desarrollo temprano.
Los tics son los síntomas hipercinéticos más comunes en la infancia y las condiciones conductuales comórbidas (especialmente el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno por déficit de atención e hiperactividad, los síntomas afectivos y la impulsividad) están presentes en la mayoría de los pacientes.
La genética sugiere que es hereditario de modo dominante y que el gen (o los genes) involucrado puede causar un rango variable de síntomas en los distintos miembros de la familia. Una persona con este síndrome tiene una probabilidad del 10 % de pasarle a uno de sus hijos el gen o los genes, siendo más frecuente en varones.
Se han destacado el papel de las vías extramotoras dentro de los mecanismos cerebrales de generación de tics.
Conclusiones:
Los medicamentos que ayudan a controlar los tics y a reducir los síntomas de trastorno relacionados incluyen los siguientes:
Medicamentos que bloquean o disminuyen la dopamina: la flufenazina, el haloperidol (Haldol), la risperidona (Risperdal) y la pimozida (Orap) pueden ayudar a controlar los tics.
Inyecciones de botulina (bótox). Una inyección en el músculo afectado podría ayudar a aliviar un tic simple o vocal.
Medicamentos contra el déficit de atención con hiperactividad. Estimulantes como el metilfenidato (Rubifen, Ritalin) y medicamentos que contienen dextroanfetamina (Aderall XR, Dexedrine, entre otros) pueden ayudar a aumentar la atención y la concentración.
Sin embargo, para algunas personas con síndrome de Tourette, los medicamentos para tratar el déficit de atención con hiperactividad pueden exacerbar los tics.
Inhibidores adrenérgicos centrales. Medicamentos como la clonidina (Catapresan) y la guanfacina (Intuniv).
Estos pueden ser útiles en el control de síntomas de la conducta, como problemas con el control de los impulsos y ataques de ira. Algunos efectos secundarios pueden incluir la somnolencia.
Antidepresivos. La fluoxetina (Prozac) puede ser de ayuda para controlar los síntomas de la tristeza, la ansiedad y el trastorno obsesivo compulsivo.
Medicamentos anticonvulsivos. Estudios recientes sugieren que algunas personas con síndrome de Tourette responden al topiramato (Topamax), que se utiliza para tratar la epilepsia.
Los estudiantes afectados con síndrome de Tourette necesitan un apoyo escolar apropiado.
Para ello, tanto los padres como los profesionales de la educación tienen que estar debidamente informados sobre el modo en que los tics y otros síntomas del síndrome, pueden afectar al rendimiento escolar y conducta de un alumno.
Referencias:
-Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, 5th ed.; American Psychiatric Association: Washington, DC, USA, 2013.
-Jódar Vicente, Mercè; José Barroso Ribal (2005). Trastornos del lenguaje y la memoria. Barcelona: Editorial UOC. ISBN 9788497882200.
keywords:
Síndrome de la Tourette y tics, síndrome de la Tourette y rendimiento escolar, síndrome de la Tourette y trastorno obsesivo compulsivo, herencia y síndrome de la Tourette, topiramato y síndrome de la Tourette , fluoxetina y síndrome de la Tourette, risperidona y síndrome de la Tourette, guanfacina y síndrome de la Tourette, risperidona y síndrome de la Tourette, tipos de tics en el síndrome de la Tourette, risperidona y síndrome de la Tourette, déficit de atención e hiperactividad y síndrome de la Tourette.
