La Oxitocina y la Pareja

-Resumen:

La oxitocina es una de esas sustancias más interesante tanto en la mujer como en el hombre, ya que es la responsable, aunque no la única, de los lazos afectivos.Actúa como hormona y neurotramisor, junto con las feromonas

El motivo es que la oxitocina está muy relacionada con los lazos afectivos de todo tipo, tanto aquellos que son tan fuertes como los que experimentan las parejas de amantes como los más difusos, como los que unen a una persona con su comunidad de amigos y vecinos.

-Desarrollo:

El ciclo de sueño y vigilia y lo que se llama ritmo circadiano (es decir, las diferencias entre el día y la noche), la oxitocina está implicada en él.

La glándula pituitaria o hipófisis es una pequeña glándula ubicada en la base del cerebro. Está justo debajo del hipotálamo su función depende de él: en lo que se refiere al lóbulo pituitario posterior, también conocido como neuropituitario produce oxitocina que actúa como neuromodulador en el sistema nervioso central modulando conductas sociales, patrones sexuales y comportamiento parental.

La oxitocina es, pues, una pequeña pieza de la química corporal que nos permite explicar sensaciones tan intensas e inexplicables como las que tienen que ver con el amor.

Explica el enamoramiento esa fase que dura alrededor de 2 años, junto con las las feromonas las cuales hacen que las emociones predominen sobre lo racional.

Esta es la naturaleza de lo que se siente cuando se ve a una persona determinada, cuando se abrazan con alguien, o cuando besan.

Como hormona, viaja a través de la sangre para llegar a reaccionar de una manera determinada y que tienen que ver con nuestra manera de ajustarnos a distintas situaciones del mejor modo posible.

Como neurotransmisor, la oxitocina viaja establece la comunicación entre las neuronas y por tanto tiene un papel en la transmisión de las señales eléctricas a lo largo del sistema nervioso, incluyendo el cerebro.

Funciones de esta hormona

Sin embargo, una de sus funciones concretas más significativas tiene que ver con el amor y en el afecto. La oxitocina participa en esta vertiente de nuestra vida como hormona y también como neurotransmisor.

-Con relación al amor:

Teniendo en cuenta que no existe una sola concepción sobre lo que es el amor y, en todo caso, en la experiencia subjetiva relacionada con el afecto y el enamoramiento intervienen muchas otras sustancias.

Sin embargo, es verdad que hay algunos patrones en los que puede verse la relación que hay entre la oxitocina y todo ese conjunto de experiencias y procesos que tienen que ver con el amor y el afecto.

Por ejemplo, los niveles de oxitocina aumentan cuando hay que reconocer caras familiares. También aumentan al mirarse a los ojos con seres queridos.

Tiene un papel a la hora de recordar a miembros del propio grupo y, en general, es segregada en cantidades relativamente grandes en situaciones relacionadas con el amor y el apego.

Cuando experimentamos la sensación de compartir una relación íntima con otra persona y cuando sentimos que estamos en un ambiente de confianza, se segrega más oxitocina.

De hecho, se ha visto que en las personas con depresión crónica a las que se les da una dosis extra de oxitocina, estas tienden a prestar mayor atención a las caras felices que a las tristes.

-Reguladora del parto y la maternidad

La oxitocina interviene en otros procesos más variados. Etimológicamente, la palabra “oxitocina” significa “nacimiento rápido” en griego. Esto es así porque, como hormona, la oxitocina tiene un papel muy importante en los partos y, por extensión, en la lactancia, dos procesos fundamentales en la maternidad.

En concreto, la oxitocina hace que ciertas fibras musculares del útero se mantengan contraídas durante el parto, y además es la responsable de que se produzcan las contracciones antes del nacimiento.

Además, la oxitocina tiene ciertos efectos mecánico sobre las mamas, haciendo que estas eyecten leche materna.

-El papel de esta hormona en la sexualidad

Durante el acto sexual, los niveles de oxitocina en sangre acostumbran a ser significativamente más altos de lo normal.

Esta hormona tiene un importante papel en los procesos químicos y mecánicos que intervienen en la sexualidad.

Se ha comprobado, por ejemplo, que la oxitocina interviene en la aparición de contracciones vaginales que hacen más fácil que el esperma llegue al óvulo.

En el caso de los hombres, produce contracciones en la próstata y las vesículas seminales.

Además, tanto en hombres como en mujeres los niveles de oxitocina en sangre alcanzan su máximo durante el orgasmo.

– Creando vínculos sociales:

Como hemos visto, la oxitocina está fuertemente asociada con la generación de lazos afectivos, y no solo los relativos a la maternidad.

Esto no es casual. El hecho de poder contar con la ayuda y el apoyo de otras personas es una de las grandes ventajas evolutivas que ha tenido nuestra especie, y es por eso que se puede decir que la oxitocina forma parte de ese vinculador social que tanto nos ha beneficiado.

Si el hecho de entrar en contacto con una persona nos hace segregar más oxitocina, a la larga se entra en una dinámica química y relacional en la que los lazos personales son muy fuertes. De este modo, el vínculo se hace muy resistente y permanece a lo largo del tiempo.

Referencias bibliográficas:

Delgado, J. M. (1998). Manual de Neurociencia. Editorial Síntesis.

Puelles, L. (2008). Neuroanatomía. Editorial Médica Panamericana.

 

Cinco tipos de relaciones de pareja postmodernas - Infobae